Yo me llamo, el concurso de imitación musical del Canal Caracol llegó a su final este 11 de diciembre. Tras la transmisión de 87 capítulos, se conoció el nombre del ganador de la novena temporada del formato. Luego de escuchar a todos los finalistas, que en esta edición fueron los dobles de Luis Miguel, Carin León, Shakira y Miguel Bosé, el público votó y decidió que el imitador que hacía su trabajo a la perfección era Juan Carlos Parra, quien se puso en la piel del intérprete de La justiciera.
Aunque el ganador de los 500 millones y del trofeo fue el oriundo de Bucaramanga, otros concursantes ganaron grandes premios a lo largo de la competencia, por ejemplo, los imitadores de Shakira y Miguel Bosé. ‘Yo me llamo Luis Miguel’ fue otro de los afortunados, y gracias a su talento e intuición, ganó 100 millones de pesos.
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¿Qué hizo el imitador de Luis Miguel con los 100 millones que ganó?
En una entrevista con Tropicana, el artista, cuyo nombre real es Roberto Melo, habló del dinero obtenido. En la charla mencionó que invirtió gran parte en saldar parte de una responsabilidad financiera que había adquirido. “Pagué parte de una deuda que tenía y ya quedé debiendo poquito”, contó entre risas.
Reveló, de igual manera, que, por temas legales, relacionados con impuestos, no recibió el dinero completo. “No te dan 100″, afirmó. Así mismo, reiteró que su trabajo como imitador requiere capital, por eso el dinero que gana debe invertirlo en su propia carrera. “Nada más la cantidad de plata que gastamos en vestuarios”, señaló.
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Es de recordar que el imitador ganó el premio el mismo día en que fue eliminada de la competencia la doble de Ángela Aguilar. En ese momento, Symphony, la inteligencia artificial de la competencia, que fue incluida como un nuevo miembro del panel de jurados, compuesto por Amparo Grisales, César Escola y Pipe Bueno, lo eligió como el mejor imitador de la jornada.
El doble del ‘sol de México’, que en ese capítulo interpretó Suave, tuvo el chance de escoger, al azar, una de las estatuas que contenía el dinero que se entregaba noche a noche en el concurso. En honor a su colega, ‘Luismi’ decidió tomar la pequeña escultura que tenía tallada la cara de la imitadora de la cantante mexicana. Dentro de la estatua estaba el bono dorado con una cifra escrita: cien millones de pesos.
