El actor y director tenía 76 años
Alí Humar nació en El Colegio, Cundinamarca, más popularmente conocido como Mesitas del Colegio, pero no creció allí. Su infancia transcurrió en Bogotá, a donde llegaron sus padres cuando tenía pocos meses de nacido. Su papá, Yusef Omar Mustafá, un palestino que llegó inicialmente a Barranquilla, luego a Bogotá y más tarde al municipio cundinamarqués, fue conocido como El Turco, y en sus primeros años se sostuvo económicamente con un local de venta de mercancía en el mencionado pueblo. Su madre era oriunda de la región del Tequendama.
Aunque en alguna oportunidad a Alí le hicieron una invitación para ir a Ramallah y estuvo a punto de conocer la tierra de sus antepasados, surgieron inconvenientes y no pudo, en realidad, tampoco hizo mucho por lograrlo. Sus viajes se dieron por otros países como Italia, Suecia, Estados Unidos y Guatemala, donde vivió por temporadas en busca de aventuras y conocimiento de culturas.
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MEJOR DIRECTOR
A la actuación llegó porque su hermana Yamile, madre de la presentadora Catalina Aristizábal, hacía parte de un grupo de teatro y él terminó vinculado en un papel pequeño. Trabajó de la mano de Santiago García en La Candelaria y pronto llegó a la televisión. En una entrevista con Vea reconoció que se sentía pésimo actor y cada vez que iba a grabar, por aquel entonces en los estudios del centro de Bogotá, se sentía mal y padecía del estómago, así que un día decidió no volver, con tan buena suerte que necesitaron un director, por la renuncia del titular, y ahí empezó a dirigir, la que consideró su verdadera vocación.
Antes de dirigir por 20 años Sábados felices, Humar fue director de novelas y series dentro de las que se cuentan: Los Cuervos, Lola Calamidades., Señora Isabel, Castillo de naipes, entre otras.
Ocasionalmente regresó a la actuación en roles muy puntuales como Pablo Morón en Sin senos no hay paraíso.
El actor y director estaba casado con la relacionista pública Guiomar Jaramillo, a quien conoció cuando ella era practicante universitaria y él era actor. Se casaron en Panamá y tuvieron dos hijos: Fabio Andrés y Valentina. Alí, dueño de un gran sentido del humor, había declarado en aquella entrevista que, así como a su padre lo enamoró el ambiente y los paisajes del Colegio, Cundinamarca, a él la naturaleza también lo seducía, por eso pasaba temporadas en su finca. Alí falleció este 29 de junio a sus 76 años de edad, después de varios días internado en la clínica batallando contra el covid.