La presentadora de Noticias Caracol narró el duro momento cuando sobrevivió a la explosión de un carrobomba en Medellín.
Era 17 de mayo del 2001. Alejandra Giraldo, quien actualmente es periodista y presentadora de Noticias Caracol, cursaba el grado once de bachillerato. Ese día, se encontraba con un grupo de amigos en un restaurante del Parque Lleras, en el sur de Medellín.
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En una entrevista con el programa La Red, la presentadora antioqueña recordó que se encontraba en ese lugar sin el permiso de su mamá. Eran las 10 p.m. cuando de repente, un estallido recordó la época más difícil de Medellín. Un automóvil cargado con 60 kilos de dinamita explotó dejando 8 muertos y más de 80 heridos, entre ellos, Alejandra Giraldo, quien minutos antes de la tragedia se dirigía al baño con una de sus amigas.
Sigue a la Revista Vea en WhatsApp“Me paré y avancé unos pasos. Recuerdo que volteé y le dije, ‘Marce, vamos’, como para darle la mano, y cuando ella me estiró la mano ¡Pum! Cuando abrí los ojos y fui consciente, no veía sino humo luces y sonidos aturdidores; muchas sirenas y gritos. Es algo muy extraño”, relató.
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En medio de los gritos, los llantos, el desespero y el sonido de las sirenas de las ambulancias, se dio cuenta que su cuerpo estaba lleno de esquirlas y mucha sangre, sin duda, ese fue uno de los momentos más difíciles de su vida. “Tengo muchas cicatrices en las piernas, son cicatrices de la violencia absurda de este país: la bomba del Parque Lleras en Medellín en el 2001. Perdí la visión media y se me desencajó la mandíbula, pero estaba viva. Cuando me pude parar, llamé a mi mamá y ella estaba super angustiada”.
Como si fuera poco, según el relato de Alejandra Giraldo, quedó atónita cuando se dio cuenta que su amiga había perdido uno de sus ojos. Ambas fueron atendidas por el cuerpo médico, junto al resto de víctimas. Ya han pasado 20 años, sin embargo, la presentadora quedó con algunas secuelas, aparte de las cicatrices en su cuerpo. “El paso de un avión era traumático. Yo llego a un lugar e identifico las salidas de emergencia. Creo que eso es lo que más hago, de lo que soy consciente. No queda igual el alma, la memoria o la piel”.
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A continuación, sus declaraciones completas:
