La dolorosa recuperación de Andy Rivera

Andy Rivera, el ex de Lina Tejeiro e intérprete de Alguien más, sufrió problemas de salud por exceso de ejercicio y reconoce que fue irresponsable.

Por Redacción Vea

04 de junio de 2021

ANDY RIVERA CANTANTE

ANDY RIVERA CANTANTE

Fotografía por: @elfilmakero

Nadie imagina que Andy Rivera, el cantante de éxitos como Me haces falta, La oficial, Increíble o Alguien me gusta, tema en el que comparte créditos con Jhonny Rivera y Jessi Uribe, hubiera estado al borde de perder una pierna, en peligro su movilidad y con depresión por los medicamentos que tomaba. Hoy, luego de dos cirugías reconoce que sus excesos a la hora de hacer ejercicio lo llevaron a sufrir un verdadero calvario. Esta es su historia.

“Cuando llegué de España estaba gordito, y aquí llegué a comer, entonces me engordé más y me dediqué a hacer ejercicio. Cuando tenía 17 años estaba con un instructor físico que me exigía muchísimo. Un día estaba alzando el peso que él me había colocado y sentí el tirón fuerte en la espalda. Digo que ahí fue donde me lesioné. La primera hernia discal”, cuenta el artista.

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Rivera no le prestó atención, pues en su mente estaba la idea de cambiar su aspecto y trabajar su cuerpo. Entrenaba por horas. “Encontré una pastilla que me quitaba el dolor, que se había extendido por la pierna. La tomaba antes de entrenar y le daba duro. El resto del día me aguantaba el malestar. Ya no me podía poner los zapatos, la ropa interior, ni reír. El dolor era insoportable. En Bogotá me dijeron que me tenían que operar porque había un nervio de la columna comprimido y podía perder la pierna. Fue una cirugía bien delicada”.

UNA LECCIÓN NO APRENDIDA

Andy tuvo que pasar por terapias para aprender a caminar de nuevo. “Me recuperé y empecé a hacer crossfit. Andaba por la vida como si nada hubiera pasado. Me obsesioné con competir levantando peso. No hice bien las cosas y terminé otra vez con una hernia discal”.

Esta lesión llegó justo cuando su carrera estaba pasando por un gran momento. “Estaba viajando, tenía muchas giras y el dolor era una tortura. Me tenían que ayudar a hacer casi todo. Para montarme a las tarimas en las presentaciones, tenía que estar prácticamente dopado, y eso me estaba afectando mucho anímicamente, porque estaba bajo el efecto de medicamentos fuertes que me causaban depresión”, comenta.

Fue una época difícil donde el cantante no disfrutaba las presentaciones en vivo. “No sentía conexión con el público, y cuando me di cuenta de eso, sentí que toqué fondo y recapacité. Mis papás estaban muy preocupados por mi salud. Aproveché el no tener presentaciones para someterme a otra cirugía. Esta última hernia fue la que me hizo poner los pies en la tierra”. Asegura que eso de llevar un dolor intenso por mucho tiempo, le ha enseñado a ser tolerante en muchos aspectos de la vida.

Su proceso de recuperación estuvo apoyado por sesiones de hidroterapia y ejercicios con bandas elásticas. Con la nueva rutina de ejercicios, ha disminuido 10 kilos. “Hace poco tuvieron que hacerme un bloqueo en la columna, que consistió en inyectar directamente al nervio una serie de medicamentos para disminuir el dolor. Espero que sea el último proceso que deba hacerme”.

FOTOS: cortesía @elfilmakero

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